Recibí de mi pareja, el amor de mi vida, Itatí, una crítica fundada sobre mi cuento La Fila. Aseguro que no era mi intención burlarme de cosas tan serias contra las que vine luchando toda mi vida. Lo escribí en una fila de un banco en 1986, el cuento gustó durante años, estuvo publicado en revistas (entre ella la mín NUEVAS LETRAS), se leyó en un encuentro literario de Nuevas Letras en la bodega del café Tortoni, lo transmitieron en programas de radio, en páginas de Internet, y hasta en una ocasión en un programa de televisión, pero yo lo escribí y como jamás corrijo, no le presté atención, y no me di cuenta que podía herir sensibilidades de alguna gente. Y sólo hoy, ante la crítica de Itatí, comprendí que podía resultar agresivo. También debemos decir que en estos 31 años que pasaron desde que lo escribí, la sociedad avanzó mucho en al consciencia de temas como el abuso, el acoso, la discriminación, y que sin bien, todo eso sigue sucediendo, e incluso yo diría en mayor proporción que antes, está para todos (para mí ya lo estaba entonces) muy claro que está mal.
Ya es tarde, tarde para sacarlo de libros y revista de papel que nunca fueron mías y no tengo, para retiralo de páginas y blog que lo reprodujeron por doquier, y para hacer que quienes lo hayan escuchado no lo escuchen o que quiene stienen quella Nuevas Letras no la tengan.La sola idea de que pueda parecer que yo ridiculizo un tema que me duele tanto, me tiene llorando, literalmente, llorando sin parar, no es una manera de decir, llorando duran más de 10 horas, llorando escribo este texto.
Hoy, como un símbolo, y como una forma, escasa es cierto, de reparación; publico una versión modificada de La Fila y agradezco a Juan Carlos (que es una persona de bien) el espacio en su radio y la posibilidad de que al tomar visilidad un cuento que era del pasado, haya podido notar que pude ser agresivo y me mata la idea, lo lamento. Años y años milito en Internet, en mis talleres, y en cuanto lugar pueda, contra el ataque a las mujeres y el no culpar a la víctima y en la frase de personajes "el trasero me están tocando" "la culpa es suya, por qué no se pone esa minifalda" se patentiza todo lo que critico. No recuerdo, sinceramente no recuerdo, si cuando lo escribí quise criticar precisamente esa manera de pensar (en la medida en que no todos los personajes de una obra son la voz del autor) pero lo que estoy seguro es que jamás quise avalarla. Aún así, no quiero tomar ese camino, de la autodisculpa, porque si pudo parecer que yo avalo esa visión abstrusa y prepotente, definitvamente lo lamento y me disculpo. También el final del cuento, según veo, no es demasiado apropiado.
Por eso y aún sabiendo que siento un precedente para justificar la censura en el arte. Opto por hacerlo, ya que no osaría pedir que no lo fuera, ni podría tampoco; y lo hago porque privilegio mi defensa de décadas a la mujer sobre el riesgo de que mis palabras puedan ser utilizadas en favor de futuras censuras.
AHORA ENTONCES, AMIGOS, AMIGAS, LES PRESENTO El CUENTO en versión 2017
NUEVAS
LETRAS EN AL FINO DE LA MEDIANOCHE
Desde
el alma
LUIS ALBERTO BATTAGLIA
LUIS ALBERTO BATTAGLIA
LA FILA nueva versión (de Luis Alberto Battaglia, primera
versión en Nuevas letras 19, Mayo 1987)
-No es que uno quiera quejarse, pero
por qué no ponen otro empleado.
-¡Si al fin de cuentas uno va a terminar creyendo que le están haciendo un favor!
-Y... con la cara que lo miran...
-Pero ellos no tienen la culpa... es el sistema.
-El qué...
-Dijo que era el sistema.
-Lo que pasa que son unos vagos.
-Yo no creo que sea el sistema, es la gente.
-Y quién fabrica el sistema.
-¡No, es el sistema que fabrica a la gente!
-¡Pero cómo! ¿No era el sistema?
-Son las dos y media.
-Se me hace tarde para la clase de acordeón.
-¿Estudia acordeón?
-¡No! Él enseña acordeón... es profesor.
-Yo no creo que sea la gente... es el sistema.
-¿Con qué sistema?
-Con el de Beyer
-No, Beyer es para piano.
-Beyer no, es Bayer... aspirina Bayer
-Bayaspirina
-Bueno, es lo mismo.
-Lo mismo no, porque la gente hace el sistema.
-Pero Beyer no es la aspirina.
-No, Beyer es el laboratorio.
-No es Beyer es Bayer... aspirina Bayer.
-No, Beyer es el autor...
-Qué autor...
-Del sistema...
-Y quién fabrica el sistema... esa es la cuestión.
-¿Beyer está fabricando aspirinas?
-No es Beyer es Bayer... aspirina Bayer.
-¡Pero hombre! no son sólo aspirinas.
-¿Dijeron que Beyer da clases de acordeón?
-Él da clases.
-¿Él es Beyer?
-¡No!, está muerto.
-¿Está muerto?
-¡Pero si yo lo veo vivo!
-¡No!, dijeron que Bayer está muerto, el autor del sistema Bayer.
-¡Beyer! no Bayer
-¡Eso Beyer!... aspirina Beyer.
-¡No hombre!, Beyer es el autor, Bayer es la aspirina
-Acá tengo.
-Qué cosa.
-Una Bayaspirina, estaban pidiendo una Bayaspirina.
-¡No!, lo que decían que Bayer tiene una fábrica de acordeones.
-¡Acordeones Bayer!
–Sí.
-Yo conocía las aspirinas.
-¿Y quién es el culpable? El sistema.
-¿¡El culpable de la aspirina?!
-¡No! eso no se lo permito... Bayer no habrá hecho sistema para acordeón, pero es excelente...
-¡Si al fin de cuentas uno va a terminar creyendo que le están haciendo un favor!
-Y... con la cara que lo miran...
-Pero ellos no tienen la culpa... es el sistema.
-El qué...
-Dijo que era el sistema.
-Lo que pasa que son unos vagos.
-Yo no creo que sea el sistema, es la gente.
-Y quién fabrica el sistema.
-¡No, es el sistema que fabrica a la gente!
-¡Pero cómo! ¿No era el sistema?
-Son las dos y media.
-Se me hace tarde para la clase de acordeón.
-¿Estudia acordeón?
-¡No! Él enseña acordeón... es profesor.
-Yo no creo que sea la gente... es el sistema.
-¿Con qué sistema?
-Con el de Beyer
-No, Beyer es para piano.
-Beyer no, es Bayer... aspirina Bayer
-Bayaspirina
-Bueno, es lo mismo.
-Lo mismo no, porque la gente hace el sistema.
-Pero Beyer no es la aspirina.
-No, Beyer es el laboratorio.
-No es Beyer es Bayer... aspirina Bayer.
-No, Beyer es el autor...
-Qué autor...
-Del sistema...
-Y quién fabrica el sistema... esa es la cuestión.
-¿Beyer está fabricando aspirinas?
-No es Beyer es Bayer... aspirina Bayer.
-¡Pero hombre! no son sólo aspirinas.
-¿Dijeron que Beyer da clases de acordeón?
-Él da clases.
-¿Él es Beyer?
-¡No!, está muerto.
-¿Está muerto?
-¡Pero si yo lo veo vivo!
-¡No!, dijeron que Bayer está muerto, el autor del sistema Bayer.
-¡Beyer! no Bayer
-¡Eso Beyer!... aspirina Beyer.
-¡No hombre!, Beyer es el autor, Bayer es la aspirina
-Acá tengo.
-Qué cosa.
-Una Bayaspirina, estaban pidiendo una Bayaspirina.
-¡No!, lo que decían que Bayer tiene una fábrica de acordeones.
-¡Acordeones Bayer!
–Sí.
-Yo conocía las aspirinas.
-¿Y quién es el culpable? El sistema.
-¿¡El culpable de la aspirina?!
-¡No! eso no se lo permito... Bayer no habrá hecho sistema para acordeón, pero es excelente...
-No es Bayer, es Beyer
-Bayer... aspirina Bayer
-Qué pasa allá adelante
-Parece que al empleado le duele la cabeza porque están tocando el acordeón
-El trasero me están tocando
-¿Quién?
-Ese degenerado... el del pulóver azul
-El degenerado es el sistema
-¡No! es el hombre
-Un hombre no, es un muchacho... tendrá unos diecisiete años.
-¡No!, es más viejo. por lo menos cuarenta... yo lo conozco desde chico.
-¡Qué barbaridad no respetan nada!
-Tiene razón.
-¡Claro! si yo lo conozco desde los cinco años.
-¡Desde los cinco años hacía eso!
-Sí, a los cinco yo ya tocaba.
-¡Y todavía lo cuenta!, a usted sí le doy un cachetazo
-¿Por qué le pega?
-Creo que se propasó con una nena de cinco años.
-¡Qué degenerado!
-Yo no soy degenerado, además no tengo diecisiete, tengo quince.
-¿Qué dicen allá atrás?
-Parece que cinco tipos aturdieron a un joven de 15 años con un acordeón Beyer y después le hicieron tragar diecisiete aspirinas.
-Bayer... aspirina Bayer
-Qué pasa allá adelante
-Parece que al empleado le duele la cabeza porque están tocando el acordeón
-El trasero me están tocando
-¿Quién?
-Ese degenerado... el del pulóver azul
-El degenerado es el sistema
-¡No! es el hombre
-Un hombre no, es un muchacho... tendrá unos diecisiete años.
-¡No!, es más viejo. por lo menos cuarenta... yo lo conozco desde chico.
-¡Qué barbaridad no respetan nada!
-Tiene razón.
-¡Claro! si yo lo conozco desde los cinco años.
-¡Desde los cinco años hacía eso!
-Sí, a los cinco yo ya tocaba.
-¡Y todavía lo cuenta!, a usted sí le doy un cachetazo
-¿Por qué le pega?
-Creo que se propasó con una nena de cinco años.
-¡Qué degenerado!
-Yo no soy degenerado, además no tengo diecisiete, tengo quince.
-¿Qué dicen allá atrás?
-Parece que cinco tipos aturdieron a un joven de 15 años con un acordeón Beyer y después le hicieron tragar diecisiete aspirinas.
LUIS ALBERTO BATTAGLIA
Versión 2017
Cumplí Itatí, con vos y contodos aquellso qeu pudieron sentirse mal. No merezco disculpado tal vez, pero sé en mi alma que puse la cara y pedi disculpas... MÁS NO PUEDO AHCER
Y... ahroa en vío esto al blog y voya seguri como este momento, llorando.
UN ABRAZO DE LETRAS
BUSCADOR LAHORMYDOC PAGINANTES
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BUSCADOR LAHORMYDOC PAGINANTES
BIENVENIDO A LAS METROLETRAS
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